miércoles, 31 de enero de 2007

Armando un Personaje
Necesito armar un personaje y quiero describirlo para ir dándole forma y dejarlo listo por si en algún momento lo necesito, ya sea para un cuento, un verso, una parla o lo que fuere. Sería un buen nombre llamarlo Armando, si es que de esto justamente se trata. Y si, Armando tu sentido, tu ser intrínseco es esto. Vas a nacer de entre las líneas para ser esto, un ser que espera inherte un sentido de la vida que le quede a gusto y le venga en gana al escritor o sea yo o sea tu creador.
Armando, sos un personaje. No en el sentido simpático de la palabra, sino en el literal, tal y cual como suena. Personaje. Todavía no sabemos de qué, pero no nos importa, porque vas a ser multifacético o bien, aplicarás en distintas situaciones. Como a ese personaje que le pasan distintas cosas en la vida.
Armando, vamos a darte una imagen. Te vamos a poner pelo castaño, digamos que lacio con ciertos remolinos cerca de la frente tirando para la izquierda. De un metro ochenta aproximadamente. Con una contextura física normal tirando a flaco. De ojos claros eso si, y sin cicatrices que desfiguren tu escracho. De tez blanca y con las manos algo curtidas (las manos son un punto a favor que tenés. Las minas dicen que están buenas).
De personalidad tranquila, siempre pacífico y buena onda. Correcto y ubicado por sobre toda las cosas. Pero leche hervida cuando sentís una injusticia.
Hablas poco o mucho según corresponda y eso hace a tu "ubicación". Inteligente hasta ahí. Digamos que de la media un pelín más arriba, pero hasta ahí.
Armando, sos especial por algo que no sabés que es. Digamos que la vida pasa por al lado tuyo y vos te enteraste cuando ya pasó. Y saltaste a destiempo. Te sirve para el futuro, pero lo pasado casi que pisado.
El pasado tiene en vos algo recurrente, y en ciertas cosas te da revancha. No es que tengas un pasado oscuro. Para nada.
Digamos que tu familia se compone de un viejo vuelto a casar. Tu vieja que cuida de tu abuela pero bien sola está (aunque no por ganas de ella sino porque tiene la particularidad de vivir primero para los demás y después para ella). Como verás están separados tus viejos. Pero es típico de las familias modernas. Es algo que pasa bastante a menudo y pasa en las mejor familias, no te asustes.
Ahhh.. no te puse edad. Qué edad te gustaría tener? Que pregunta. Si me la hicieran a mi diría que la que tengo está buena y me sienta muy bien. Y creo que es la que te sugeriría. Y como hoy la batuta la tengo yo y vos acatas a rajatabla sin críticas, vamos a decir que tenés 30 años y ya que estamos los cumplís en Febrero, el 24, como yo.
Te estoy regalando no solo una vida, sino también mi edad y mi cumpleaños. Pero no tenés nada que ver conmigo, salvo estos puntos de contacto y estas líneas que juntos vamos armando. Justamente Armando!
Estas de novio, con una chica que por ahora no viene al caso su nombre. Estas bien a secas. Como siempre te pasa. Ya pasó el entusiasmo, la vorágine y el desbalanceo emocional. Ahora estas bien pero a sabiendas de que podrías estar mucho mejor.
Laboralmente estas ocupado trabajando como redactor en algún diario zonal y escribiendo a escondidas tus cosas. Te gusta mucho leer y hacer anotaciones a los costados de las hojas de las cosas que te gustan y que te vienen a la cabeza.
Hace mucho tiempo atrás, tanto como diez años aproximadamente, conociste a una chica, muy linda por cierto. La particularidad es que nunca se fue. Siempre estuvo en tu cabeza o por ahí, vagando, pero siempre y de alguna manera, cerca. Nunca jamás de los jamases pasó nada, pero hace poco se tiraron de ambos lados las cartas sobre la mesa y la flecha de cupido les pegó cerca.
Este dato no es menor porque te va a ubicar en el tiempo novelístico de la historia. No te la imagines ni romántica ni trágica. Simplemente va a ser una historia de la que vas a formar parte activa y principal. No tengas miedo. Dejate sorprender por las cosas que te van pasando en la vida. Tu capacidad de asombro y sorpresa es inmensa. Te sirve y te hace bien. Tu ansiedad goza de buena salud y se ampara en niveles normales y controlables.
No fumás. Salís a correr tres veces por semana y comés bastante sano. De colesterol no tenés ningún problema. Creo que en el último examen te dio 180. Del bobo estás bárbaro. Todo está en orden.
Armando, en todo este tiempo no te puse un apellido. Acá, todavía para ciertos sectores el apellido es digamos que una de las premisas importantes para ser alguien en esta vida. Digamos que eso se daba de manera mucho más marcada antes. Hoy en día sigue existiendo pero quizás se ve más como una llave o herramienta, que en algunos casos, cuando te hacen el examen de ingreso, de no tenerla rebotás y te cuesta el doble remarla. Para que te des una idea existe en el país una guía azul la cual lista todos los apellidos patricios del país. Eh, se vende.
Pero bueno, volviendo al tema de tu apellido. La verdad es que yo no comparto esta teoría, quizás porque me tuve que acostumbrar a cargar en mi mochila el Alvarez paterno que heredé. Igual fue un lindo ejercicio de vida y sirvió para poner cada cosa en su lugar. Soy Alvarez porque soy hijo de mi viejo, que se llama también Alvarez de apellido, y tal como lo portara su padre, alias mi abuelo. Y así para atrás un montón. Lo que pude ver al indagar un poco la historia de mi familia es que no encontré, en todos los personajes de las cuatro generaciones anteriores a mi que me crucé, a ningún garca, preso, chorro, corrupto, militar, policía, asesino a sueldo, cleptómano, pirómano y/o violador. Lo que si encontré es gente que laburó muchísimo, que creyó, siendo inmigrante, en este país como una oportunidad de progreso y mejora. Y de alguna manera así lo fue. Algo lento y sin abundancias para las generaciones venideras lamentablemente. Si encontré a un tatarabuelo irlandés que le gustaba la bebida y a veces se le iba de las manos alguna cachetada. Pero ese tuvo un hijo noble, grande y del cual me llevo varias cosas de su corta vida. Dejó todo porque se había enamorado de una italiana que osaba ser católica (él y toda su familia claro está era protestante). Y fue feliz y se hizo de abajo en el ferrocarril.
Los italianos por parte de mi vieja, se hicieron también en el ferrocarril. Algunos desde la relojería y otros desde las jefaturas de estaciones. Pero todos con laburo honesto y honrado.
A lo que voy con esto es lo importante que es llevar el apellido que cada uno porta con orgullo y la frente en alto, y que si te lego el mío o te lo doy en herencia, es por esto de que para mi trae consigo toda la cadena de ADN de mi familia. Está de más aclarar que lo veo como algo positivo que te aportaría. Pero todavía no quiero tomar una decisión al respecto. Dejémoslo para más adelante.
Lo importante y para resumir, es que ya estas siendo alguien sin todavía serlo del todo. Digamos que estás en el vientre materno de estas primeras hojas escritas, dando los primeros latidos.
por Pirincho